Recibir una demanda por una deuda puede generar una gran preocupación y estrés. Muchas personas piensan que no hay opciones para defenderse, pero la realidad es que existen varios mecanismos legales que pueden ayudarte a evitar un embargo o incluso la condena al pago de la deuda.
En este artículo, analizaremos cómo actuar si has sido demandado por una deuda, los errores que debes evitar y las estrategias legales más efectivas para tu defensa.
1. ¿Qué es una demanda por deuda?
Una demanda por deuda es un procedimiento judicial que inicia un acreedor (empresa, banco, particular, etc.) para reclamar el pago de una cantidad de dinero adeudada. Según la cuantía y la naturaleza de la deuda, la reclamación puede seguir distintos procedimientos:
- Procedimiento monitorio (para deudas dinerarias, líquidas y exigibles sin límite de cuantía).
- Juicio verbal (si la deuda es inferior a 6.000 euros y el deudor se opone al monitorio).
- Juicio ordinario (para reclamaciones de más de 6.000 euros o casos complejos).
2. ¿Qué hacer si recibes una demanda por deuda?
Cuando recibes una notificación judicial sobre una demanda por deuda, es importante actuar con rapidez. No responder a tiempo puede derivar en la admisión de la deuda y la ejecución de un embargo.
Paso 1: Leer detenidamente la demanda
- Revisa quién te demanda (un banco, una empresa de recobros, un particular, etc.).
- Verifica la cantidad reclamada y el concepto de la deuda.
- Comprueba si la deuda ha prescrito (por ejemplo, las deudas de tarjetas de crédito suelen prescribir a los 5 años).
Paso 2: Consultar a un abogado especializado
Un abogado experto en reclamaciones de deuda podrá analizar si existen errores en la demanda o si hay posibilidades de defensa. Algunas estrategias incluyen:
- Oponer prescripción de la deuda.
- Detectar errores en la documentación del acreedor.
- Negociar un acuerdo extrajudicial.
3. ¿Cómo defenderse de una demanda por deuda?
Existen varias vías de defensa ante una demanda por deuda. Algunas de las más efectivas son:
A. Prescripción de la deuda
Cada tipo de deuda tiene un plazo de prescripción diferente. Si la deuda ha superado ese tiempo sin que el acreedor la haya reclamado judicialmente, puedes oponerte alegando prescripción.
B. Falta de documentación o errores procesales
El acreedor debe probar que la deuda existe y que eres responsable de ella. En muchas ocasiones, las empresas de recobro adquieren deudas sin la documentación completa, lo que puede ser una vía de defensa.
C. Nulidad de cláusulas abusivas
Si la deuda proviene de un préstamo, una tarjeta de crédito o una financiación, es posible que contenga cláusulas abusivas que puedan ser declaradas nulas por un juez.
D. Negociación de un acuerdo extrajudicial
En muchos casos, negociar con el acreedor puede evitar un procedimiento largo y costoso. Un abogado puede ayudarte a conseguir un acuerdo más favorable para ti.
4. ¿Qué pasa si no me defiendo?
Si no contestas a la demanda dentro del plazo establecido (normalmente 20 días hábiles en el procedimiento monitorio y 10 en el verbal), se considerará que aceptas la deuda y podrá iniciarse el procedimiento de ejecución, lo que puede llevar al embargo de bienes y cuentas bancarias.
5. Consejos finales
- No ignores la demanda, actúa rápido.
- Revisa si la deuda ha prescrito.
- Consulta con un abogado antes de responder.
- Negocia con el acreedor para evitar el juicio.
Conclusión
Una demanda por deuda no significa que todo esté perdido. Existen muchas estrategias legales para defenderse y evitar consecuencias graves como embargos.
Si te encuentras en esta situación, lo más recomendable es contar con asesoramiento legal experto para proteger tus derechos y tu patrimonio.
Si has recibido una demanda por deuda y no sabes qué hacer, contacta con nosotros ahora mismo para una consulta telefónica. Un abogado especializado te ayudará a encontrar la mejor solución para tu caso.

